Un lugar donde la innovación se encuentra con la tradición, donde los sueños de volar se hacen realidad y donde el arte de vivir se saborea en cada rincón. Ya sea entre las estrellas, en la cabina de un avión o con un tenedor en la mano, esta ciudad te invita a descubrir su alma multifacética. ¿Listos para despegar?
Conocida como la Ciudad Rosa por el cálido color de los ladrillos que visten sus edificios, Toulouse es mucho más que un destino pintoresco del suroeste francés. Este vibrante enclave combina una rica historia, un presente tecnológico y una exquisita gastronomía en una experiencia única que seduce a todo aquel que lo visita. Aquí, la exploración no tiene límites: desde surcar el cosmos hasta pasear sobre las huellas de los pioneros de la aviación, una ciudad que te invita a despegar los pies del suelo y dejarte llevar por su magia.
El aliado perfecto para explorar la ciudad y descubrir sus rincones es el Pass Tourisme, con él obtendrás entrada gratuita a museos y monumentos, descuento en muchas actividades a precios reducidos y visita guiada, así como navegar por el río Garona a bordo de los cruceros de Bateaux Toulousains, que al atardecer transforman el agua en un espejo dorado.
Cité de l’Espace: un viaje al infinito
En las afueras de la ciudad, la Cité de l’Espace abre una puerta a las estrellas. Este fascinante complejo no es solo un museo, sino un auténtico viaje a las profundidades del cosmos. Aquí se puede admirar la majestuosidad del cohete Ariane 5, caminar alrededor de una réplica a escala real de la estación espacial Mir y sentirte como un astronauta en pleno entrenamiento.
Desde noviembre de 2023, la experiencia se eleva aún más con LuneXplorer, una nueva atracción que permite vivir, literalmente, una misión lunar. Desciende por el polvoriento suelo de un paisaje selenita, realiza experimentos y siente el aislamiento del espacio exterior mientras el azul de la Tierra parece un recuerdo lejano.
Para los que sueñan con Marte, la exposición Le Terrain Martien te sumerge en un paisaje rojizo y hostil, recreando las condiciones del planeta vecino. Cada rincón de la Cité de l’Espace invita a imaginar lo que hay más allá de nuestro cielo, haciendo de Toulouse un lugar donde soñar se convierte en ciencia.
Aeroscopia: el templo de la aeronáutica
Si la Cité de l’Espace te lleva más allá de la atmósfera, el museo Aeroscopia te mantiene entre las nubes. Situado a pocos metros de los talleres donde se ensamblan los imponentes Airbus A380, este espacio es un homenaje a la aviación, uno de los grandes orgullos de Toulouse.
Aquí, los aviones cuentan su historia. El mítico Concorde, símbolo de velocidad y elegancia; el Airbus 300B, pionero de los aviones comerciales de gran tamaño; y el peculiar Súper Guppy, con su inconfundible forma, son solo algunos de los gigantes que esperan a los visitantes. Además, en sus espacios interactivos, puedes construir tu propio avión y descubrir los secretos detrás del diseño de estas maravillas tecnológicas.
La Halle de La Machine: cuando la fantasía cobra vida
La creatividad encuentra su hogar en la Halle de La Machine, un hangar que parece salido de un cuento de hadas futurista. Aquí, el espectáculo lo protagonizan máquinas únicas, como un imponente minotauro de 14 metros, que no solo puedes admirar, sino montar para recorrer una antigua pista de aviación. Cada artefacto, desde atracciones de feria hasta autómatas que descorchan botellas de champán, nos recuerda que la imaginación no tiene límites en Toulouse.
Arte y sabor
Para quienes buscan un respiro de la tecnología, el Hotel d’Assézat acoge la renovada Fondation Bemberg, un refugio para el arte clásico y moderno. Entre sus muros descansan obras de maestros como Manet, Van Dyck y Tintoretto, ofreciendo un contraste sereno a la dinámica Toulouse.
Por supuesto, ningún viaje estaría completo sin una experiencia culinaria, y Toulouse Gourmet Tours lo hace inolvidable. En el mercado de los Carmes, el chef español Alejandro Javaloyas guía a los visitantes en una ruta gastronómica con siete paradas deliciosas, donde el foie gras, los quesos y el cassoulet son protagonistas. Todo ello acompañado de showcookings y anécdotas que hacen del paseo un festín para los sentidos.
